Toda la gama de productos se realiza en acero esmaltado
vitrificado a 820º C.
Tiene como elemento base el acero, recubierto con esmalte
vitrificado por el interior y el exterior.
La unión de las características de los dos componentes lo
convierte en un material apropiado
para todo tipo de cocinas, gas, vitrocerámica, inducción.
El acero aporta la rigidez, diseño en las formas y resistencia
mecánica.
Por su parte, el recubrimiento de esmalte vitrificado le confiere
una serie de importantes
cualidades para uso alimentario: Protección anticorrosiva sin
desgaste en el tiempo,
alta resistencia química, estabilidad de colores frente a la luz, muy
difícil de rayar, fácil limpieza,
totalmente ignífugo, superficie limpia. Impide el desarrollo de
moho o bacterias.
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